Cooperativas de mujeres productoras de karité

Economía social y fortalecimiento del poder económico de las mujeres: la importancia del karité

El CECI está muy presente en el desarrollo económico local en África del Oeste vía la producción, transformación y comercialización agroalimentarias. Desde hace más de 15 años, hemos invertido mucha energía y recursos en la cadena de karité en Mali y Burkina Faso, y recientemente en Guinea y Níger. Los resultados obtenidos con las empresas sociales productoras de manteca de karité son concluyentes: el producto típicamente africano es cada vez más buscado por la industria cosmética y alimentaria internacional por sus propiedades excepcionales.

El trabajo de cooperación permitió mejorar los ingresos de decenas de miles de mujeres, miembros de organizaciones productoras asociadas. Tuvo efectos notables sobre las condiciones de vida de miles de familias en las zonas de intervención. Con la contribución de voluntarios y en colaboración con diversas organizaciones, se fortaleció la idoneidad de los socios con la capacitación de mujeres en producción, gestión, comercialización y concertación. La nueva etapa es fomentar la durabilidad de la cadena de valor, la gestión del recurso agroforestal, el desarrollo de métodos de producción neutros en carbono, así como el incremento de las ventas y exportaciones. Todas estas intervenciones representan contribuciones importantes al fortalecimiento del poder económico de las mujeres africanas, con demasiada frecuencia marginalizadas en ese terreno.

Karité y medioambiente

Una contribución financiera del Ministère des Relations internationales de Quebec, nos permitió iniciar un nuevo proyecto de economía social con un enfoque medioambiental en Burkina Faso. La producción de manteca de karité por cooperativas de mujeres ha conocido un desarrollo notable en los últimos años. Sin embargo, este crecimiento plantea nuevos desafíos medioambientales. De hecho esta actividad de producción implica un consumo relativamente importante de leña y agua, y crea residuos vegetales. A baja concentración, estos residuos no son dañinos; sin embargo, a medida que la producción aumenta, las cooperativas de productoras se enfrentan a un nuevo problema, la gestión medioambiental. Además, la presión sobre los recursos naturales (agua y leña) aumenta también de manera crítica para un medioambiente de Sahel. Dado que la mayoría de las nuevas empresas sociales prevén acrecentar su producción para satisfacer el mercado, deben tomarse ciertas medidas a mediano y largo plazo para asegurar la sustentabilidad del desarrollo socioeconómico mediante la elaboración e implementación de métodos de producción más ecológicos.

Es el desafío que intentamos enfrentar con nuestra asociación con una importante empresa social, la UGPPK, una unión de cooperativas que reúne más de 3.000 productoras de karité en Burkina Faso. A partir de tecnologías adaptadas a la producción neutra en carbono, una unidad de producción verde de manteca de karité será creada con varios objetivos: manejo de los recursos naturales, compostaje de los residuos vegetales, reciclaje de las aguas residuales, así como un mayor uso de energía renovable mediante la producción de biogás y de energía solar. La capacitación de las productoras y la optimización ergonómica de la producción, transformación y comercialización forman parte de la iniciativa, a fin de reducir el trabajo laborioso, mejorar la productividad y aumentar la eficiencia energética.

“La venta de manteca de karité nos permite ganar dinero para solucionar los problemas de la familia, la salud, la escolaridad de los niños, los huérfanos, y salir de la pobreza.”

Señora Nan Yago, presidenta de la unión de productoras de karité de Léo en Burkina Faso.